¿Vos ya sabés cuál es tu misión en la vida?
Te enseño un ejercicio para definir cuál es el propósito que te apasiona y poder desarrollarlo
¿Te pusiste a pensar alguna vez sobre el para qué de tu existencia? Es decir, ¿cuál es tu misión, tu propósito en esta vida? Y no me refiero solo a que tengas claro que es lo que te gusta hacer, sino que puedas conectarte con lo que realmente te apasiona, aquello que te conmueve hasta el alma, eso que te hace sentir que naciste para hacerlo.
Puede ser que se trate de diseñar indumentaria, ser docente, dirigir una empresa, dedicarte a la gastronomía, escribir, dibujar, desarrollarte en algún deporte y si sigo escribiendo, la lista podría ser eterna, pero en todos los casos me refiero a haber encontrado aquello que te moviliza hasta la medula y te hayas animado a concretarlo.
Si tu respuesta es sí, permitime manifestarte mi alegría y desearte que sigas siendo muy feliz cumpliendo tu propósito en la vida.
Ahora bien, si tu respuesta es no y hasta inclusive has puesto cara de: “yo no tengo tiempo para pensar en eso” o “lo dejo para más adelante cuando tenga ciertas cuestiones económicas resueltas” o “no sé qué es lo que me apasiona o para que soy realmente bueno”, entonces (y aquí es donde me froto las manos en señal de “estoy en mi salsa”) seguí leyendo detenidamente este artículo que es ideal para vos.
Para empezar, te voy a contar algo acerca de mí.
Desde que ingrese a la escuela secundaria tenía claro cuál era mi deseo: quería conocer y comprender como funciona la psiquis humana y poder trabajar con la conducta y las emociones de las personas para hacer que se sientan mejor. Eso me llevo ya a los 13 años de edad, a definir que iba a estudiar psicología. Hasta aquí puedo decir que no tuve ningún conflicto, duda ni dificultad con mi elección de carrera y ni siquiera necesite pasar por un proceso de orientación vocacional.
Pero a los 17 años, el verano anterior a ingresar a la facultad, tuve la posibilidad de viajar a Cuba (país maravilloso para conocer) y además de disfrutar de bellísimos paisajes y conocer mucho de esa interesante cultura, descubrí los ritmos cubanos y me enseñaron, al costado de la pileta del hotel, a bailar salsa.
Enorme fue mi sorpresa al detectar que me fascinaba bailar, y millones fueron mis preguntas en torno a “¿Cómo no conocí esto antes?”. Jamás en mi vida había tomado clases de baile alguno y lo único que había hecho con mi cuerpo hasta ese entonces, era ir al gimnasio a tomar las famosas clases de steps y gimnasia modeladora que estaban tan de moda allá por mediados de los años 90.
Cuando volví de mis vacaciones, previa investigación sobre todas las danzas habidas y por haber y los institutos donde podía tomar clases, decidí empezar a formarme no solo en los ritmos cubanos y caribeños en general sino más específicamente en danza jazz.
Y aunque nunca dudé de la elección de carrera que ya había hecho e ingresé a la facultad a estudiar psicología, me planteé la posibilidad de desarrollar de alguna manera en paralelo, esta nueva pasión que había descubierto.
En resumen, me conecté con mis dos pasiones, me formé en ambas y hasta me permití darme el lujo de trabajar durante algunos años como bailarina en eventos y presentaciones, más allá de tener luego mi consultorio en introducirme de lleno en el mundo de la psicología.
Terminado este relato es cuando viene tu pregunta: “¿y para qué me contás esta historia?”
Pues bien, lo que quiero es mostrarte que nunca es tarde para descubrir una pasión, inclusive cuando ni te imaginabas que podía sucederte y que, aunque tal vez no sea algo de lo que puedas trabajar o te genere los ingresos económicos que deseás, siempre tenés la posibilidad de desarrollar ese propósito, de exprimir ese talento y lograr el bienestar y la satisfacción que anhelás.
Ejercicio para definir tu PROPÓSITO
Que no sea fácil no quiere decir que sea imposible. Y para que puedas desarrollar tu potencial y sentirte realizado y a pleno con eso, voy a darte un ejercicio que te ayudará a definir cuál es tu propósito en la vida. Te recomiendo que, para empezar, tomes un papel y una birome y respondas las preguntas que te haré a continuación.
Dividiré las preguntas en dos secciones:
Autoconocimiento
>> ¿Conocés cuál es tu talento?
>> ¿Qué es lo que te hace ser diferente?
>> ¿Qué es lo hace tiempo tenés muchas ganas de hacer?
>> ¿Qué sentís que te conmueve hasta el alma y lo harías inclusive aunque no te pagaran por eso?
>> ¿Qué palabra y/o que frase te describe, o mejor dicho describe lo que amás hacer?
Visualización
>> ¿Te animás a imaginar qué pasaría si desarrollaras y exprimieras al máximo aquello que sabés hacer o para lo que sentís que sos bueno?
>> Pensá y describí la manera en que podés desarrollar tu talento y tu pasión (no te limites en esta respuesta, escribí todas las ideas que se te ocurren)
>> ¿Qué desearías haber logrado de acá a 5 años con respecto a eso que te encanta hacer?
>> ¿Qué estás dispuesto a hacer para realizarte en aquello que más hacer?
Una vez que respondiste todas estas preguntas, te invito a que las leas, les quites las preguntas dejando solo tus respuestas y armes una narración con todo lo que escribiste, donde quede claro qué es lo que te gusta hacer, qué te apasiona, en qué sentís que sos bueno y tenés talento, cómo imaginás que podés desarrollarlo y cómo te ves en unos años en cuanto al logro de tus propósitos.
La idea de este ejercicio es que el producto final sea como una historia en la que hables de vos.
¿Te animás?
Recordá tomarte el tiempo que necesites para reflexionar sobre cada respuesta. Esto es para vos y el objetivo principal es que te conectes con lo que deseas y que puedas definir cuál es tu misión en esta vida.
Contanos cómo te fue, dejanos tus comentarios, tus opiniones, decinos que te pareció el ejercicio. ¡¡Estoy ansiosa por leerte!!
Y gracias, muchas gracias por estar siempre aquí.
¡Hasta el próximo jueves!
Un fuerte abrazo
María Noel
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